¡Feliz
San Valentín! 14/2/2012
Aprovecho que es el día de los enamorados, que es nuestro
día, para agradecerte una vez más que estés a mi lado y que me hagas feliz.
Es genial tener una persona a la que escribirle un 14 de Febrero,
es fantástico tener a esa persona que te complementa,
a la que puedes darle todo tu amor y
con la que puedes expresarte sin miedo, es increíble cuando no hay que esforzarse
apenas para que crezca la ilusión,
porque crece y crece con esos pequeños detalles que hacen a este amor tan
grande.
Nuestra historia ha sido difícil, pero quien algo quiere
algo le cuesta. Hubiese sido muy fácil tirar la toalla, pero no tendría tan
valioso tesoro como eres tú.
Y pienso que todo lo que hemos luchado por lo que queríamos
nos hace más fuertes. Ahorra lo recuerdo y sonrío por todo lo que he sufrido. Ha
pasado el tiempo que ha hecho que vea que eres tú eres lo que quiero.
Como antes te veía a mi lado y me aguantaba las ganas de
besarte y como ahora no hay un minuto que pueda estar sin rozar tus labios. Como has sido mi amigo, mi
hombro donde llorar, el que me escuchaba, me aconsejaba, intentaba ayudar a mi
corazón y ahora tú eres mi corazón.
Porque me cuesta estar sin ti y en cambio, contigo corren
las agujas del reloj.
Puedo pasar horas mirando tus ojos y que seas tú lo
que más feliz me hace.
Tener esa sensación de querer gritar a toda voz lo feliz que
me haces, todo lo que nos conocemos, nos complementamos y que somos el uno para el otro. Simplemente soy para ti y tú eres para mí.
Hoy, puedo decir que tengo una persona a mi lado que me
quiere y me valora. Y que no puedo pedir
más si tú estás a mi lado.
Y si hay un día oscuro, de esos que no sale la sonrisa
simplemente cierro los ojos y…recuerdo la película “Pretty woman”, veo un Audi
A5 de color blanco que sí que luce, unas vistas desde el mirador de Alahurín, una moto en la que siempre me cuesta montarme, un casco que me aprieta
los mofletes, un Nissan a la salida
de mi instituto, llevarte la contraria, una
rosa que vive semanas (y además huele), dos pitufos enormes en mi cama, las risas cuando se me traba la lengua o simplemente la lio, el
cotilleo a todo el que pasa, las sesiones antihomosexualidad,
la lista interminable a la que me
encanta no verle fin, escuchar: “Paso, que voy ardiendo”, esas vistas de Gibraltar y el mar a mis pies, la lucecita roja en mi bb, los
masajes para las agujetas, las nubes
emborregadas, Nochevieja con la compañía
que no esperaba, escuchar esa canción entre flamenco y carnaval y el susurro de
un “te quiero” en mi oído.
Miles de recuerdo
que nunca podré sacar de mi mente y que jamás habrá folios ni tiempo para
escribir, los creas tú, no existen si no estás tú...
Te
quiero a mi lado siempre, para tener
que pasar horas despierta recordando más y más momentos, para tener esa sonrisa
de tonta que sólo tengo si detrás está tu sonrisa, para seguir sorprendiéndome
de tus sentimientos, de tus pequeños detalles que son tan grandes, para seguir
dándote todo ese amor que te mereces, para pensar en ti a cada segundo, para
preocuparme de si eres feliz, para sentir tu olor siempre muy cerca mía, para
dormirme sintiendo que me abrazas cada noche y despertarme sintiendo tus besos.
Solo dos palabras: Te quiero.
Y me temo que esto va a seguir siendo así siempre. No soy
nada sin ti, te necesito y te prometo que nunca
voy a soltar tu mano.
Tú y yo ¡SIEMPRE!
De tu
princesa que te adora.
Te
quiero.
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